El pilaf, o pilau, es un plato histórico a base de arroz que se cree originario de Turquía. Este plato de Oriente Medio, en su forma más auténtica, es un arroz aromático. En la época del califato abasí, estos métodos de cocción del arroz se extendieron primero por un vasto territorio, desde la India hasta España, y finalmente por todo el mundo. La paella española, el pilau o pulao del sur de Asia y el biryani evolucionaron a partir de estos platos.
La clave para que el pilaf salga bien es asegurarse de que los granos de arroz se mantengan separados unos de otros, ligeros y esponjosos. El líquido puede ser agua o caldo, y los aromas incluyen canela o cardamomo. El pilaf se suele preparar con carne o verduras, pero también se puede hacer solo. En ocasiones especiales se puede utilizar azafrán para dar al arroz un color amarillo, como es este caso. Apunta los pasos y… ¡A la cocina!
Ingredientes:
- 250 g de arroz basmati (blanco o integral)
- Un chorrito de aceite de oliva
- 6 muslos de pollo de corral deshuesados y sin piel, cortados en trozos
- 30 g de mantequilla sin sal
- 1 rama de canela
- 2 tiras de ralladura de limón o naranja
- 2 cucharadas de melaza de granada
- 75 g de pasas
- 500 g de agua fría
- Un pellizco de azafrán en 2 cucharadas de agua caliente
Para servir:
- 2 cucharadas de piñones
- Un puñado grande de hierbas frescas picadas (usaremos eneldo y perejil)
- 2 cucharadas de cebolla frita
- 150 g de yogur natural
Preparación del pilaf:
- Pon a remojar el arroz en agua fría durante 30 minutos. Aclara y escúrrelo.
- Mientras tanto, calienta un chorrito de aceite en una cazuela poco profunda con tapa y, por tandas, dora el pollo por todos lados. Retira y reserva.
- En la misma cazuela, derrite la mantequilla y añade la rama de canela, la ralladura, la melaza de granada y las pasas. Fríe durante 2 minutos, retira de la sartén y reserva.
- Pon una fina capa del arroz lavado en el fondo de la cazuela. En un cuenco grande, mezcla el resto del arroz con el preparado de la ralladura, melaza, pasas y las especias reservadas y sazona bien.
- Vierte todo el arroz en la cacerola y añade el pollo, empujando los trozos en el arroz. Vierte el agua. Con un palillo (o similar), haz 4-5 agujeros en el arroz y vierte el azafrán y su agua de cocción. Envuelve la tapa de la cacerola en un paño de cocina limpio y cubre la cacerola, remetiendo los extremos lejos del fuego. Deja que cueza suavemente durante 30 minutos.
- Por último, ponlo en una fuente y cúbrelo con piñones, hierbas y cebolla frita. Sírvelo con yogur para terminar tu delicioso plato de pilaf tan típico de Oriente Medio.