Hay más de 1.000 lugares en la prestigiosa lista de sitios del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, considerados de valor excepcional para la humanidad, ya sea por razones culturales o naturales. La lista incluye desde ciudades europeas hasta islas tropicales, desde parques nacionales americanos hasta iglesias africanas, y maravillas en peligro de extinción. Hemos seleccionado 20 de los lugares más bellos del Patrimonio de la Humanidad.
El Parque Arqueológico de Angkor comprende 12 templos principales y decenas de estructuras más pequeñas. El templo más grande e importante, el Angkor Wat del siglo XII, es la estrella debido a su riqueza artística y su inmenso tamaño: una superficie de casi 300 km², incluidos los bosques. Un lugar muy especial con el que empezar la lista de los lugares más bellos del Patrimonio de la Humanidad.
Fecha de inscripción como Patrimonio de la Humanidad: 1992
El Parque nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi, uno de los mejores lugares del mundo para ver gorilas en su ámbito natural, ocupa más de 32.092 hectáreas en el suroeste de Uganda. Como su nombre indica, atravesar la enmarañada maleza y el espeso follaje de los árboles del parque no es un trabajo fácil, pero sentirás que tienes la selva prácticamente para ti solo.
Fecha de inscripción: 1994
Estas montañas rayadas y de colores vivos son la respuesta de la madre naturaleza al Photoshop. La arenisca roja y los depósitos minerales se han ido acumulando en el Parque geológico de Zhangye de China durante más de 20 millones de años, lo que ha provocado este efecto surrealista de capas.
Fecha de inscripción: 2010
Tanto si la conoces como Desembarco del Rey por Juego de Tronos o simplemente como una de las ciudades más bonitas del mundo, no se puede negar el atractivo de Dubrovnik. Te recomendamos subir a las murallas que la rodean para contemplar la ciudad: se extienden por completo alrededor del casco antiguo y puedes recorrer sus dos kilómetros de longitud.
Fecha de inscripción: 1979
¿Hace falta explicar el encanto de las Galápagos? Este archipiélago formado por 13 islas grandes, nueve medianas y 107 islotes pequeños guarda muchos secretos. Si puedes, haz que tu próximo viaje sea visitar este rincón de Ecuador que parece de otra época, con tortugas gigantes que parecen dinosaurios y piqueros patiazules.
Fecha de inscripción como Patrimonio de la Humanidad: 1978
Hay una razón por la que los turistas pululan por el complejo de pirámides de Guiza, en Egipto: la Gran Pirámide está considerada como una de las siete maravillas del mundo antiguo y data de hace 4.500 años. Este emblemático monumento forma parte de los campos de pirámides de Menfis (la primera capital del antiguo Egipto), que la UNESCO reconoce por su importancia política y arquitectónica.
Fecha de inscripción: 1979
Aunque la Gran Barrera de Coral, el mayor ser vivo de la Tierra, puede verse desde el espacio, el mejor punto de vista lo tienen los ávidos buceadores y submarinistas que la visitan cada año. Si tienes que regresar a la superficie, hazlo en las islas Whitsundays, concretamente en la playa de Whitehaven, considerada una de las más bonitas del mundo.
Fecha de la inscripción: 1981
La bahía de Ha Long, situada en el noreste de Vietnam, es muy apreciada por sus aguas azules y su extensión de islas de piedra caliza, todas ellas ocupadas por árboles tropicales y vida salvaje. A bordo de un barco, experimenta por ti mismo la belleza, y los mitos e historias asociados, de esta cuenca esmeralda envuelta en la niebla.
Fecha de inscripción: 1994
En la frontera entre Argentina y Brasil, las cataratas del Iguazú, en el norte subtropical, constan de 200 saltos que alcanzan los 60 metros de altura, lo que las convierte en uno de los lugares más impresionantes del mundo, tanto visual como acústicamente (son aguas muy ruidosas). Una maravilla que no podía faltar en los lugares más bellos del Patrimonio de la Humanidad.
Fecha de la inscripción: 1984
La capital de Rajastán, también conocida como la ciudad rosa, no es el tipo de lugar que oculta sus verdaderos colores. El maharajá de la ciudad, Sawai Ram Singh II, ordenó pintar los edificios de un color rosa anaranjado en 1876 para una visita real del príncipe Alberto y la reina Victoria. En la actualidad, muchos edificios del casco antiguo de la ciudad siguen pintados de este color.
Fecha de la inscripción como Patrimonio de la Humanidad: 2019
En el norte de Etiopía, la pequeña ciudad de Lalibela es conocida por sus 11 iglesias medievales talladas en roca monolítica. Las estructuras, con catacumbas y pasajes ceremoniales, son fascinantes; la iglesia de San Jorge, o Biet Ghiorgis (en la foto), es especialmente famosa por su diseño en forma de cruz y su red de trincheras, que la conecta con las demás iglesias.
Fecha de la inscripción: 1978
Aunque las ruinas de piedra de Machu Picchu son obra de los gobernantes incas del siglo XV es el entorno natural del lugar lo que lo hace tan atractivo. Encaramada en la cima aplanada de una montaña, la maravilla del mundo moderno se beneficia del famoso telón de fondo del Huayna Picchu, de las exuberantes superficies verdes y de una barrera de picos andinos que te hace sentir como si hubieras tropezado con un secreto.
Fecha de inscripción: 1983
Por si los monasterios aún en pie del siglo XV no fueran suficientemente impresionantes, los edificios de Meteora son famosos por estar situados en picos de arenisca casi inaccesibles en el centro de Grecia. Los viajeros valientes pueden visitar el Monasterio de la Santísima Trinidad, uno de los seis monasterios que aún se conservan, a través de una escalera de 140 escalones excavada en la ladera del acantilado.
Fecha de la inscripción: 1988
La isla rocosa del Monte Saint-Michel, que se eleva sobre vastos bancos de arena y poderosas mareas, tiene un aspecto de otro mundo en su localización frente a la costa noroeste de Francia, en Normandía. En la isla hay un pequeño pueblo medieval con calles sinuosas y casas diminutas, pero la joya de la corona es sin duda la Abadía del Monte Saint-Michel, construida en el año 708.
Fecha de la inscripción como Patrimonio de la Humanidad: 1979
El monte Fuji es sin duda uno de los lugares más bonitos de Japón. Tanto si lo ves enmarcado por los cerezos en flor en primavera como si lo ves cubierto de nieve y niebla en invierno, esta montaña de 4.000 metros de altura te dejará absolutamente impresionado. Esta foto desde el parque Arakurayama Sengen explica que el monte entre en nuestra selección de los lugares más bellos del Patrimonio de la Humanidad.
Fecha de inscripción: 2013
El exuberante delta del Okavango, un delta fluvial de entre 15.000 km² y 22.000 km² en el norte de Botsuana, es como un edén del mundo real, donde guepardos, cebras, búfalos y rinocerontes vagan libremente. Visítalo durante el invierno africano (nuestro verano), tras las lluvias, cuando el delta se inunda: los pastos de la sabana están bajos, mientras que el crecimiento a lo largo de los cursos de agua atrae a una gran cantidad de fauna salvaje.
Fecha de inscripción: 2014
Esta imponente fachada de cuatro metros de altura cincelada en la ladera de la montaña jordana es aún más sorprendente cuando se sabe que data del siglo I a.C. El yacimiento es uno de los más importantes y grandes del mundo, y está situado en un paisaje de arenisca roja.
Fecha de la inscripción: 1985
Fundada en el siglo VII a.C., la histórica ciudad de Samarcanda cuenta con monumentos como la mezquita de Registán, la mezquita de Bibi-Khanum y el observatorio de Ulugh-Beg, que muestran los detallados mosaicos y la caligrafía árabe que han pasado a definir la arquitectura islámica. Sin duda, uno de los lugares más bellos del Patrimonio de la Humanidad.
Fecha de inscripción: 2001
A casi 500 kilómetros de la costa meridional de Yemen, Socotra tiene tanto la lejanía como el surrealismo de algún planeta extraño y distante. Los árboles de sangre de dragón, que parecen ovnis, son el rasgo más notable de la isla; te retamos a que los encuentres en el parque de tu barrio.
Fecha de inscripción como Patrimonio de la Humanidad: 2001
El Parque nacional de Tongariro, en la isla Norte de Nueva Zelanda, ha recibido dos designaciones de Patrimonio Mundial de la UNESCO (geológico y ecológico) y es también el parque nacional más antiguo del país. Dentro del parque se encuentra el Cruce alpino de Tongariro, una ruta de senderismo de 19 kilómetros que lleva al lago Esmeralda y lago Azul del monte Tongariro, que obtienen su precioso color verde de los minerales volcánicos disueltos en el agua.
Fecha de la inscripción: 1990
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